Los interiores del edificio están distribuidos entre volúmenes y espacios abiertos que se extienden en varias direcciones.
Un ambiente que luce incontaminado y perfectamente organizado, donde poder concederse momentos de serena intimidad doméstica.
Caracterizado por un estilo sencillo y minimalista, el edificio está ubicado en un barrio residencial y bien servido de la pequeña ciudad de Binningen, Suiza.
Sofisticación y esencialidad: dos factores clave para responder a cada tipo de exigencia.
Los interiores del edificio están distribuidos entre volúmenes y espacios abiertos que se extienden en varias direcciones.
Un ambiente que luce incontaminado y perfectamente organizado, donde poder concederse momentos de serena intimidad doméstica.
Las diferentes áreas de la vivienda manifiestan plenamente la esencia del proyecto: transmitir a la vez seguridad y calma, elegancia y serenidad.
Las líneas netas y sobrias del modelo de cocina One adquieren armonía gracias a la luz natural que se introduce en el complejo residencial a través de grandes ventanales.
La cocina, bien destacada en el contexto, luce un marcado aspecto minimalista en perfecta integración con la zona living adyacente.
Por otro lado, ciertos detalles y elementos de alto diseño y gran personalidad aportan un toque de dinamismo y sofisticación a la atmósfera interior, inmaculada y cristalina.
La disposición de la cocina interpretada a la perfección mediante el uso de materiales y colores en contraste neto y a la vez equilibrado con el ambiente circundante.
La solidez del fenix Negro Ingo de los muebles se compensa con la calidez del enchapado Roble Light de la trasera, pasando por la neutralidad del blanco y del gris natural de las paredes.